¿Y si después del Juicio Final todo se pudiera restaurar? ¿Y si ese acto pudiera hacer que un ser querido fuera exculpado? Eso es lo que uno de los Cuatro Jinetes del Apocalipsis se pregunta y llega a la conclusión de que es lo que debe hacer pero, ¿a qué precio? Luchar contra sus propios pecados y fantasmas se vuelve en parte de la aventura sin conocer el final y a dónde nos llevará dicho camino. Ese es el camino que Muerte, con nosotros como ejecutores y espectadores al mismo tiempo nos hará realizar.
Darksiders 2 es la segunda parte de ese “Zelda” oscuro y adulto que ya nos presentó hace unos años Virgil Games a través de THQ, pero mucho, MUCHO, más completo y grande, aunque al final peca de lo mismo que su primera parte.
En esta ocasión le toca el turno a Muerte, tal vez el más famoso de los Jinetes del Apocalipsis por ser el último y el más temido, además de lo que propiamente representa dicha figura. Pasamos directamente a la acción, encontrar al Padre Cuervo para que nos diga cómo resucitar a la Humanidad y así que Guerra sea perdonado primero y ver quién ha empezado dicho complot como siguiente paso

Las mazmorras que nos encontramos están muy bien, aunque los puzzles son normalmente bastante sencillo y no tendremos problema alguno en resolverlos. Como he dicho antes estamos ante un “Zelda” así que ya sabréis que es un juego que cuando se consigue X objeto-poder podéis acceder a otras zonas antes prohibidas y como siempre se agradece esa progresión que hace que uno quiera explorar siempre pero claro, cuando llegas a la última mazmorra del juego antes del jefe final y ves que lo que encuentras hace que la rejugabilidad fuera inmensa solo lo usas ahí y adiós muy buenas, hombre, ves mucho potencial desperdiciado. A mi la verdad es que fue algo que me jodió muchísimo y que aún no alcanzo por comprender.

Por último un poco de evolución del personaje y configuración del equipo. Lo primero la verdad es que da mucha rejugabilidad porque las armas son de producción aleatoria, así que quitando las legendarias nunca llevaréis las mismas y no, las legendarias no las usaréis mucho ya que muchas veces son superadas por distintas armas, sobre todo las demoníacas, que ganan poder al “consumir” otras armas y armaduras.
Luego el tema de los poderes hay 2 ramas y luego dentro distintas opciones que nos darán mucha diversidad de configuración pero, cuidado, pues el nivel máximo es 20 y hace que no podamos desperdiciar ningún punto de habilidad. En resumen, esto hace que jugar otra partida haga que no nos vayamos por el mismo camino sino que podamos cambiarlo y así ser una experiencia distinta cuando hablamos de luchar contra nuestros enemigos.
Terminando ya el que sea un port se nota, sobre todo en el control que se ve que esta optimizado para un mando pero a diferencia de su primera parte que uno necesita un archivo para que se controlara más o menos bien, aquí no hace falta y más o menos no tenemos problemas al controlar a Muerta de una forma fácil y cómoda, aunque ciertas teclas molesten un poco. Por otra parte las opciones gráficas son mayores a su primera parte y hace que la configuración gráfica sea también mucho más sencilla.
Así que si queréis un conclusión sería la siguiente, buen juego que peca al final del mismo de pereza por parte de los desarrolladores al tener unos últimos momentos poco espectaculares comparado con el inicio y la parte media del juego y es una pena, porque si hubieran regulado todo un poco más les hubiera salido un juego mucho más redondo pero aún así es recomendable y si disfrutaste del 1º su segunda parte es lo mismo pero mejorado y más grande.