Organ Trail: Director's Cut

Zombies. Muertos vivientes. Infectados. Sean lo que sean, estos seres desde tiempos remotos han estado atormentando las almas de los mortales, y más recientemente, con el arquetipo creado desde las películas de George A. Romero, son uno de los enemigos más repetidos y explotados en el mundo de los videojuegos, aunque normalmente no molestando más allá del disparo o golpe necesario para acabar con ellos y poder continuar. Pero ¿Qué ocurre si la única opción es escapar de ellos? ¿Qué es lo que harías? ¿A quién te llevarías? Para esta situación, Organ Trail es el simulador perfecto para averiguarlo.

The Oregon Trail (Apple II, 1981)

Más que hablar del argumento en el juego, Organ Trail tiene mucho más que decir por su origen que por el juego en sí, remontándose a principios de los años 70. Por aquel entonces, en las escuelas y universidades de Norteamérica, las computadoras comenzaban a conquistar el mundo docente, abriendo un nuevo abanico de posibilidades para la enseñanza. En ese marco, y entre muchos otros softwares, producido por el Consorcio Educativo Computacional de Minnesota, apareció The Oregon Trail, una aventura interactiva que contaba las penurias de los colonos americanos para atravesar el país a través de la ruta de Oregón en busca de la costa oeste, incidiendo en los problemas principales e históricos que se podían encontrar en su contexto y en la gestión de los recursos que disponían, pudiendo tanto acabar como perecer en el trayecto. Un videojuego del que a lo largo de los años se han hecho múltiples versiones hasta la actualidad, ya de una forma más lúdica gracias a su éxito inicial, siendo la versión más conocida la lanzada para Apple II en 1981, versión de la cual Organ Trail hace homenaje más allá de los gráficos.

¿Qué sería de este juego sin la disentería?

¿Y donde llegó el momento de pasar de las dificultades de los colonos americanos a evitar el apocalipsis zombie? Eso se lo debemos a The Men Who Wear Many Hats, un pequeño equipo indie centrado en un principio en juegos flash gratuitos, donde se creó Organ Trail originalmente como tal, y tras su éxito lo llevaron a móviles y compatibles vía crowdfunding, creando la compañía en el camino. Cambiaron el atravesar ríos por atravesar hordas de zombies, el cazar para buscar comida a rebuscar objetos mientras evitas a los zombies, la costa oeste por el refugio antizombie (que también está en la costa oeste), las estampidas… por estampidas de animales zombies, pero en ambos podemos sufrir disentería, porque hay cosas que no hacía falta cambiar. Ni tampoco faltan los guiños a películas, personajes, series, otros videojuegos, y bromas varias, algunas sutiles, otras no tanto, porque Organ Trail también tiene mucho de parodia de toda la dimensión que abarca el universo de los zombies.

Al iniciar una partida todo comienza de la misma manera: rodeado de zombies, tratando de captar la intrincada forma de disparar del juego, cuando ya sin balas y con los muertos vivientes todavía ahí, Clements, un viejo sacerdote, te salva de una muerte segura (Si es que quiere, claro). Gracias a él, puedes escapar en dirección Washington en busca de tus otros cuatro compañeros de viaje, en su vieja ranchera, mientras escuchas en la radio el inminente bombardeo de la zona por parte del ejército de los EEUU. Pero en el corto trayecto a la capital, Clements empeora de salud y es mordido por un zombie, quedando infectado, por lo que la única opción es… matarlo. Una vez allí, ya con tus compañeros, escoges los víveres y enseres necesarios para empezar el viaje para escapar de allí, en dirección de un rumoreado refugio antizombie ubicado en la costa oeste. Y es que a partir de aquí, el juego se resume en la gestión de esos recursos disponibles y de la propia salud de tus pasajeros y de ti mismo, el conductor de la ranchera y jefe de la expedición durante el viaje. Para ello, debes parar en distintos lugares, buscando lo que puedas necesitar en ellas: comprar, intercambiar, rebuscar objetos en el campo, hacer trabajos para obtener dinero, comprar partes del coche, descansar, obtener información, porque durante estés viajando sucederán multitud de eventos, donde en la mayoría de los cuales serán pequeños sucesos de los que no tendrás control alguno, y te complicarán, o ayudarán, durante el viaje. También podrán ocurrir otro tipo de situaciones que dependerán de tus decisiones, incluyendo algunas que serán minijuegos (Como las hordas o las estampidas) u otras que se asemejan a aquellos libros de “Crea tu propia aventura” donde una mala decisión te puede hacer perder algo muy valioso.

Junto a la hoguera, buscando lo necesario en la ciudad

Lo primero que vi del videojuego... como la vida misma

La gracia del juego reside en lo que puede ocurrir, y eso lleva a quién le puede ocurrir. Como contó Mara Gilbert hace un tiempo sobre el juego, tanto el nombre de tu personaje como la de tus cuatro compañeros los escribes al principio, se mantienen durante toda la partida, personificando en ellos todas las desgracias y completando con la imaginación las imágenes del juego que los gráficos retro no te pueden mostrar, pudiendo ver cómo las pasan canutas tus amigos, tus familiares o Chuck Norris, que tiene su gracia especial en el juego. En mi caso, he jugado varias partidas con los compañeros de nuestro podcast, y no tardó mucho en encontrarme con Tumba discutiendo, Cormac vomitando y Grekiu mordido por un zombie, sin contar que a Mara, por un error de Araq, se llevó un balazo matándola a la primera de cambio. Porque esa es otra, tus compañeros pueden morir, convertirse en zombies, y mil cosas más, siendo sólo indispensable para continuar el conductor de la ranchera. Y estos sucesos en cada partida son distintos y aleatorios, pudiendo enfrentarte todavía a eventos nuevos después de varias partidas completas de dos o tres horas cada una, no miento, ya que tras 25 horas todavía he encontrado objetos nuevos. Sin embargo, al aumentar la dificultad te das cuenta que el juego es sólo un poco más difícil, y una vez lo dominas, solo te da un poco más de guerra (Aunque incluye un modo sin fin que puede hacer las delicias de los retos imposibles), y por tratar de emular un juego con una jugabilidad muy arcaica, algunos detalles no serán admisibles para cualquier jugador, porque a pesar de que se han cambiado muchos detalles desde The Oregon Trail hasta Organ Trail, al fin y al cabo el juego no es más que un juego de menús, donde algunos minijuegos, como en los que debes manejar el personaje y disparar, son una queja habitual de los jugadores porque tienen una dificultad inicial elevada, algo que los desarrolladores ya han explicado por activa y por pasiva que se trata de una decisión hecha adrede para provocar indefensión al jugador. De hecho, los que se quejan deberían ver cómo se disparaba en el The Oregon Trail original…

No podían dejar de incluir la queja en el juego, en plan coña

Resumiendo, Organ Trail Director’s Cut es un videojuego que me ha sorprendido gratamente. Pensaba que su tipo de juego no era para mí e iba a ser demasiado caduco en su desarrollo, y no podía estar más equivocado. Remezclando una vieja idea, y metiéndole mucho humor, se consigue un videojuego con el que tontamente se consiguen horas de partidas variadas de un juego que apenas cambia. Y como ya ha dicho Cormac en el podcast “da mucha más sensación de simular un apocalispsis zombie, que muchos juegos modernos que fingen serlo” convirtiéndose en una especie de Serious Game sobre el manual de supervivencia zombie o “¿Qué pasaría si hubiera un holocausto zombie?”, que junto con unos cuantos contenidos extras surgidos por su campaña de financiación, y una buena banda sonora, lo hacen muy recomendable, y más aún por los pocos euros por los que se puede conseguir.

Organ Trail: Director's Cut

Desarrolladora: The Men Who Wear Many Hats

Plataformas: Windows, Mac, Linux, Android, iOS

Idiomas: Inglés

Comprar: Humble Store, Steam, Desura, Google Play, AppStore

Aquí dejo la lista de reproducción de mis cuatro vídeos de una partida completa a Organ Trail Director’s Cut en nuestro canal de VadeGamersTV. No hay mejor prueba de cómo es este juego.

PD.: Clements te salva al principio… si es que quiere, porque como toma falsa del gameplay que subí a VadeGamersTV me encontré un bug (o algo poco probable que introdujeron los desarrolladores, con lo bromistas que son no me extrañaría nada). Lo puedes ver aquí.