Análisis: Titan Quest Gold

Si la historia de la humanidad da para historias, valga la redundancia, ya no digamos las distintas mitologías existentes. Una de las más famosas y conocidas es la griega, con sus héroes, bestias, dioses y batallas. ¿Quién no conoce a Hércules, Zeus, el Minotauro del laberinto de Minos o la Hidra de Lerna?. Si además unimos partes de la mitología egipcia y de la china y lo mezclamos todo con un RPG de acción obtenemos Titan Quest Gold.

Argumento

Somos un héroe que llega al pueblo de Helos que esta siendo sitiado por unos sátiros. A partir de ahí nos adentraremos en los distintos paisajes de Grecia, Egipto, Babilonia, China y el mismísimo Inframundo. Todo para salvar a la humanidad de los Titanes o de los mismos dioses.

Así comienza nuestra aventura que bebe principalmente de la mitología griega a nivel de argumento y poco más, mientras a nivel de ambientación y enemigos se basa en las 3 mitologías antes mencionadas. Y es una verdadera pena porque con la grandísima riqueza que posee una sola mitología del mundo antiguo, mucho más si hubieran juntado las 3 a ese nivel. Como ejemplo más claro tenemos el Age of Mythology donde junto las mitología griega, egipcia y nórdica de una forma más que aceptable. Por desgracia este no es el caso y con tal transfondo han realizado una historia y una trama bastante normal y llena de de tópicos, sobre todo en la expansión.

Gráficos

Estamos ante unos gráficos en 3D con vista isométrica con los que podremos realizar cierto zoom para ver los detalles de los modelados. Dichos modelados están muy bien realizados y poca pega se les puede achacar. Además los efectos de magias y demás se realizan a la perfección aunque el fuego da cierto trabajo al motor gráfico y puede ralentizarlo algo, aunque no es algo demasiado pesado. La entrada de los entornos abiertos del exterior a las mazmorras es otro cuento y durante 1-2 segundo se ralentiza de una forma bastante molesta aunque el problema solo llegue ahí, no interfiera en la jugabilidad.

El diseño artístico del juego es aceptable a todos los niveles aunque el inframundo posee partes que tal vez hallan sido tratada de forma poco correctas con las descripciones en la mitología y es también la parte que puede dar más juego y que queda bastante sosa en muchas partes, siendo en otras totalmente perfectas y bellas.

Sonido

Estamos ante un apartado más aceptable a nivel de efectos sonoros y música, con algunos temas con mucha fuerza y otros más normales. El problema de la música es que muchas veces llega a no escucharse aún teniéndola a máximo volumen y perdiéndose muchas veces ese efecto psicológico que crea en el jugador.

A nivel de doblaje es en español y únicamente los NPC’s principales, los demás son mudos. Este doblaje es aceptable y en la expansión ni siquiera existe ya que por una razón u otra eliminaron todo doblaje de esta parte del juego.

Jugabilidad

Bien, estamos ante un Action-RPG y por lo cual poco hay que explicar en cuanto a los controles. El ratón es el principal control y con los accesos rápidos del teclado podremos activar habilidades, hechizos o pociones.

Los arboles de habilidades son variados y divididos en 9 maestrías. En el nivel 2 elegimos la 1º maestría y en el nivel 8 nos dan la oportunidad de elegir una 2º si así lo deseamos. Después es lo clásico de subir niveles a las habilidades o sus sinergias. De esta forma la cantidad de personajes que podemos llegar a crear es realmente elevada y sin contar las propias vertientes distintas que podemos realizar dentro de las distintas clases. Realmente es un gran acierto esa enorme cantidad de configuraciones distintas, desde magos guerreros, guerreros puros, invocadores, magos de fuego, magos de hielo, magos de electricidad, etc... Además, al crear nuestro personaje podremos decidir si es varón o mujer y el color de la vestimenta, el problema de este sistema es que es más una diferencia a nivel gráfico que de estadísticas, con lo que es bastante indiferente la elección de un sexo u otro.

Nuestro inventario será bastante grande con el paso de los actos, se expande de forma automática, podemos crear portales de forma ilimitada aunque solo 1 a la vez, 2 configuraciones de armas cambiables de forma muy rápida, un baúl que tendremos que comprar con dinero para hacerlo más grande y otro para cambiar con otros personajes que hallamos creado. Además la configuración de teclas es bastante grande, teniendo 2 barras para dichos controles.

Las misiones principales y las secundarias nos darán experiencia con otros tipos de recompensas y hay de todo tipo, desde las típicas de recadero a únicamente hablar con ciertos personajes después de salvarlos de una jauría de fieras. Son normales y la escusa perfecta para las masacres que realizaremos.

Lo peor es que el equipamiento, además de los jefes finales, lo dan ÚNICAMENTE enemigos humanoides. Me explico, durante toda la aventura la gran mayoría de enemigos son del tipo de sátiros, hombres tigre, hombres cocodrilo, hombre dragón, hombres mono, hombres pez, demonios de forma humanoides, centauros, mujeres pantera, mujeres pantera con 4 patas, hombres rata, hombres hormigas, ….. Creo que os hacéis a la idea, en una minoría quedan otro tipo de bestias e incluso dinosaurios. Mi crítica en este aspecto es que con 3 mitologías del mundo antiguo y la inmensa cantidad de bestias mitológicas ¿por qué esa obsesión por sólo usar seres humanoides que porten armas como las únicas que nos pueden dar equipamientos? ¿Es quizás por hacerlo más realista en ese punto? Creo que es un fallo de diseño muy grande y que le quita espectacularidad a este título y lo que es más importante, diversión.

Del equipamiento hay que decir que esta muy bien pues no solo tenemos los típicos de armas y armaduras de distinto nivel, incluidos los poderosos objetos legendarios, sino también recetas para poder formar distintos objetos como pequeños amuletos o conjuros que nos darán distintas habilidades o estadísticas dependiendo de su nivel. Esto hace que la búsqueda de objetos no solo se realice a nivel de armamento o vestimentas sino a una gran diversidad.

Por último tenemos los niveles de dificultad: Normal, Épico y Legendario. Todos iguales, aunque esto hace aumentar de forma muy grande la monotonía que posee el título. Tal vez lo mejor y por lo que seguiremos jugando los niveles de dificultad es que aparecen monstruos legendarios como la Mantícora, el Talos, la Hidra de Lerna o el Rey Dragón Muerto Viviente, estos seres serán grandes adversarios y sus botines aún más grandes. Quitando eso y el normal aumento de la dificultad las diferencias es nula entre uno y otro nivel llegando al nivel de que los mapas son exactamente los mismos en ciertos casos.

Conclusión: Estamos ante un juego muy divertido y entretenido que nos quitarán muchas horas y que engancha de una forma profunda sobre todo por la gran diversidad de configuraciones posibles de nuestro personajes. Aunque el mayor problema de este juego, al igual que los demás Action-RPG, es lo monótono que se vuelve con el tiempo. También es una pena el inmenso trasfondo que posee al referirse a varias mitologías del mundo antiguo y no aprovecharlo como es debido, aún así, es un juego que no defraudará a nadie.